Tumba de Herodes

Una de las ventajas de la pensión donde vivo de lunes a viernes, es el cable, especialmente el National Geographic Channel. Es espectacularmente esquemático, educativo y entretenido.

De aquí he obtenido mis últimos conocimientos misceláneos que puedo compartir en largas conversaciones con mi padre, y ahora, también con ustedes.

Siempre he admirado con cierto recogimiento y respeto la arquitectura de antaño, sobre todo, de la antigüedad. Miles de personas daban su vida en estas construcciones, eran AÑOS de ingenio y astucia, tanto en la planificación como la ejecución de estos monumentos a la grandiosidad.

Un ejemplo de ello, son las construcciones comandadas por Herodes. Estamos hablando de más de 2000 años atrás. Este tirano, como lo describe Flavio Josefo en sus papiros, protagonista de uno de los hechos más lamentables registrado en la Biblia al ordenar la matanza de los inocentes, hecho que aún no se sabe a ciencia cierta si fue efectiva o no; además de sus innumerables caprichos y serias luchas de ego, resultó ser uno de los más grandes arquitectos y genios de la antigüedad.

Se casó y tuvo hijos, sin embargo, bajo la más mínima sospecha de complot en su contra para tomarse el trono, mandó asesinar a toda su familia. Fue así como mató a su esposa, a quien amaba perdidamente, y luego a todos sus hijos. Herodes no estaba dispuesto a compartir el poder ni la magnificencia, y por ello no escatimaba en pérdidas.

"Autor de más de 22 templos, palacios, fuertes y ciudades en la antigua Judea, además de un puerto submarino en Cesarea que muchos comparan con las Grandes Maravillas de la Antigüedad, sus obras siguen sorprendiendo a los ingenieros del mundo moderno." Desarrolló la primera cúpula utilizando moldes de madera y sobre estos acomodó los bloques de roca y edificó los primeros arcos edificanción que ayuda a distribuir de forma equilibrada el peso en las columnas. Fue un hombre brillante, un Da Vinci para su época.

Herodión fue uno de sus palacios más célebres, ocupando una superficie superior a 26 canchas de fútbol. Alineó sus construcciones en los puntos cardinales, construyó su tumba desplazando la tierra de una colina contigua a modo de esconder la tumba a medida que la iba edificando, y fortificó este palacio para evitar cualquier invasión.

Otra de las grandes creaciones que me asombraron al ver este programa fue la megaestructura realizada en el puerto de Cesarea como ofrenda a Marco Antonio, el primer rompeholas del mundo. Se movieron piedras una brutalidad de kilómetros, se hicieron moldes de madera en el fondo marino que luego de ser llenados de una mezcla similar al hormigón y se secaba, se retiraban, dieron origen al puerto más moderno de la época. Vislumbrando las razones de porqué se destruyó esta magnífica obra de ingenería, estudiaron el fondo marino extrayendo una muestra vertical con un tubo a introducido a varios metros de profundidad. Conclusión: los restos encontrados en dos niveles del corte estudiados con carbono 14, muestran los restos de dos tsunamis ya que muestran restos de cerámicas de las casas del puerto mezcladas con elementos marinos. Estos eventos naturales son los responsables de que hoy no podamos ser testigos de la magestuosidad de esta construcción.

Ehud Netzer, el arqueólogo israelí que ha dedicado tres décadas de su vida al estudio de este visionario, señala haber encontrado el sarcófago de Herodes, de una piedra roja con finos y delicados tallados dejando en evidencia los honores al difunto, dignos de un emperador, sin embargo, no se encontró en él inscripción alguna que testifique con certeza que dicho sarcófago corresponda a Herodes. Su veracidad se fundamenta en el lugar que se encontró y en las características del sarcófago que aparecieron tras su reconstrucción.

Herodion, Masada, Cesarea y el Segundo Templo de Jerusalén son las obras más emblemáticas y sobrecogedoras de este ingenioso tirano, amante del poder. Sin embargo, Herodes murió sólo y más tarde, sufrió incluso la profanación y absoluta destrucción de su tumba.